lunes, 18 de enero de 2010

SHERLOCK HOLMES


La película de Guy Ritchie trae polémica desde el primer día, se ha criticado desde la elección de Robert Downey Jr y Jude Law para los papeles principales hasta el enfoque del personaje de las novelas de Sir Arthur Conan Doyle, incluso he leído en varias webs que Sherlock Holmes y Watson son copias, en esta película, de House y Wilson en la serie de Brian Singer.

Las polémicas eran infundadas. No soy un experto en la materia pero sí he leído algún libro del detective y en realidad esta es la versión más aproximada de Sherlock Holmes que se ha visto en cualquier otro medio que no fueran las propias novelas, en las que no aparece el famoso atuendo de gabardina y gorro que hemos visto en tantas adaptaciones, ni la frase "elemental mi querido Watson", ni tantas otras cosas que se han ido implantando en el personaje a lo largo de los años. Sir Arthur Conan Doyle nos presentó a Sherlock Holmes como un tipo excéntrico, que no da excesiva importancia a la higiene o a las relaciones personales, experto luchador de boxeo y otras artes marciales, un genio de la percepción y un adicto al opio y la cocaína. Todo esto, salvo el tema de las adicciones, viene en la película. El propio Watson es más fiel a las novelas, ya que es un médico exmilitar con problemas de juego.
Sobre si los personajes son una copia de "House", decir que en todo caso sería al revés. Brian Singer no ha escondido nunca que el personaje de la serie está basado en Sherlock Holmes, incluso el piso del doctor es el 221B, como el del detective, aunque no en Baker Street claro. Además, en la serie se hacen referencias continuas a las novelas de Conan Doyle, como nombres de secundarios o citas del propio House.
Dicho todo esto, que me parecía importante señalar, paso a mis conclusiones sobre la película.

Sherlock Holmes es una buena película de aventuras, con ciertos toques de "buddie movie" al más puro estilo arma letal. Ni es la película de acción desenfrenada que parecía prometer el trailer, ni es la película policiaca o de detectives que cabría esperar.

Guy Ritchie pasó mucho tiempo sin hacer una película acorde con su talento, curiosamente coincide con el tiempo que estuvo casado con Madonna, y ahora se está recuperando. En "Sherlock Holmes" demuestra una vez más que es un director muy dinámico, que donde está más cómodo es en las escenas de acción o en los cambios de velocidad. Sabe manejar perfectamente el slow-motion, algo que está muy de moda, muchos directores lo usan, pero muy pocos lo hacen bien. Incluso nos regala varios planos imposibles y algunas escenas a velocidad rápida, todo muy bien llevado a cabo. Pero, a pesar de todos estos momentos, Guy Ritchie sabe que esta película no es para lucimiento del director, aquí lo importante son los personajes, y por lo tanto los actores, sobre los que descansa el peso de toda la película.

Robert Downey Jr es un actor enorme, de los elegidos para tener un carisma sobrenatural. Llena la pantalla, sobreactúa y lo hace bien, por raro que suene. Esto no es algo nuevo, Downey lo lleva demostrando mucho tiempo, solo que ahora a los responsables de Hollywood no les parece un riesgo contratarle, ha madurado el hombre.
Pero para mi sorpresa, me ha gustado mucho la interpretación de Jude Law, enérgica, y es que me sorprende porque el actor siempre me ha parecido un sosainas. Pero en esta película se sale, he de reconocer.
La química entre Sherlock Holmes y Watson era vital para la película, si entre Robert Downey Jr y Jude Law no hubiera complicidad, no habría donde rascar. Pero no solo hay química entre ellos, sino que es lo mejor de la película. Si nos acercamos a una franquicia, que es más que probable, el casting del dúo principal es perfecto.
La única que no termina de cuajar en la película es Rachel McAdams, que no es la Irene Adler que debiera, astuta y carismática, sino que se pasea por las escenas sin pena ni gloria.
En cuanto a aspectos técnicos, la ambientación de la época victoriana es increíble, siendo en su mayoría realizada con decorados, como toda la vida, aunque se implementan con croma y CGI, sin que cante en absoluto. La banda sonora me ha sorprendido muchísimo, con melodía pegadiza para la franquicia incluída. La paleta de colores en la película se basa en el azul y el gris, que ayuda a representar el Londres victoriano de forma más acertada de lo que se ha hecho en otras ocasiones.

Dicho todo esto, podríais decir que considero esta película una obra maestra. Pues no es así.
La película falla en lo más básico, el guion. Es curioso decir que en una película sobre un detective, lo peor sea la trama del caso que se ha de resolver. Aquí ocurre exactamente eso. Lo normal sería ir presentando las pistas pertinentes durante la película, llevarnos en una dirección, y luego metérnosla doblada en el desenlace y que el público se quede asombrado. No es que esto no ocurra, es que ocurre pero el caso es tan enrevesado que consigue que ni te interese en exceso ni te sorprenda en su conclusión. El fallo es garrafal. Pero todo lo demás está tan bien, que la película se salva con honores.

2 comentarios:

  1. La he visto hoy y me ha gustado mucho. Quiza tengas razon en lo de lo enrevesado del caso pero a mi si que me ha enganchado, aunque me ha fallado la resolucion

    ResponderEliminar
  2. No digo enrevesado en plan difícil de seguir, me refiero a que es un caso muy forzado, que no te terminas de creer...

    ResponderEliminar

Comenta en Espacio00: